Lic Monica Arcas
“Solo las personas que son capaces
de amar intensamente pueden sufrir también un gran dolor, pero esta misma
necesidad de amar sirve para contrarrestar su dolor y curarles”
Leon
Tolstoy
El duelo es un proceso
de perdida de un objeto significativo para la persona, se puede tratar de la
muerte de un ser querido, la perdida afectiva de una persona con la cual se ha
tenido una relación significativa o bien una abstracción equivalente como ser
el duelo por la patria en un exilio, el duelo por la salud en un proceso de
enfermedad, o el duelo por un ideal caído.
Los seres humanos
nacemos con un fuerte lazo con el otro, nuestra condición, a diferencia de los
animales es de una gran indefensión fisiológica, por eso los apegos primarios
sellaran una impronta de necesidad de protección y seguridad que se dirige
hacia personas especificas generalmente la madre del infante, esta forma tan
arcaica se mantiene a lo largo del ciclo vital. El apego es supervivencia de la
especie, solo la amenaza de perdida dispara sentimientos de ansiedad y dolor
emocional, proporciona al infante una base segura que condicionara en el futuro
como establecerá los sucesivos lazos afectivos.
La perdida de un lazo
humano significativo es traumática para el ser humano, produce un estado de
desequilibrio con sentimientos de tristeza y muchas veces de retraimiento de
interés del mundo exterior. El duelo es
un proceso, es decir requiere un esfuerzo, una tarea mental y unas fases del
proceso que no son lineales sino que muchas veces están mezcladas, la
psiquiatra Kubler Ross, definió etapas del duelo como ser:
Ÿ Negación o shock
Ÿ Ira
Ÿ Depresión
Ÿ Negociación
Ÿ Aceptación
La negación es un
mecanismo defensivo en donde no se acepta la perdida y aparece un estado de
bloqueo, este momento puede tener diferentes grados, acorde al sujeto como
vivencia la perdida, hay procesos de duelo por ejemplo la muerte de un hijo en
donde el deudo tiende a momificar la situación, por ejemplo deja la habitación
tan cual estaba cuando su hijo estaba vivo, o sirve un plato en la mesa como
cuando existía.
La persona en duelo en
este estadio tiene conciencia intelectual de la perdida pero aun no lo ha
metabolizado emocionalmente. Una de las menciones frecuentes de los deudos es
sentir que esos días son vividos como “raros” perturbadores, ya que han
producido un quiebre en la vida cotidiana.
En una etapa posterior
perder el vinculo lo lleva a un estado de dolor profundo y bronca, muchas de
las veces esta ira es proyectada hacia afuera, a Dios, que se lo “quito”, a los
médicos “que se equivocaron” al destino, etc., pero en el fondo corresponde a
un sentimiento dirigido al objeto perdido, porque hay un abandono que no puede
ser conciente, si lo fuera generaría culpa. Hay un sentimiento de enfado,
debido a la frustración de la perdida, en el caso de una perdida afectiva
implica conectarse con la idea de que aquello que se proyectaba en el horizonte
como posible, no fue, entonces aparece un sentimiento mas arcaico que es volver
a sentir el desapego infantil y esto trae ansiedad hasta pánico, toda perdida
significativa tiende a llevar al sujeto a la regresión, que se manifiesta como
una forma de desamparo
En la fase depresiva
aparece la tristeza como emoción primaria, es el sentimiento mas común, que se
expresa muchas veces en forma de llanto, el llanto evoca a una señal que tenia
el infante a modo de comunicar una necesidad de comprensión y de búsqueda de
protección, también la ansiedad cumple un rol importante en este momento que va
desde la sensación de inseguridad que puede llevar al pánico como producto del
desamparo que siente el deudo, cuando es el caso de una perdida mortal, la
muerte del otro implica también la toma de conciencia de la finitud de uno. En
cuanto a las sensaciones físicas muchas veces se experimentan estados de
activación neurovegetativa como ser aumento de la frecuencia cardiaca,
sensación de opresión en el pecho, nudo en la garganta, hipersensibilidad al
ruido, falta de energía, sequedad bucal, y a nivel cognitivo aparecen muchas
veces pensamientos intrusivos o imágenes de la persona desaparecida sufriendo o
muriendo. Hay en muchos casos trastornos en el ciclo del sueño (insomnio de
conciliación, o despertar temprano) que de hacerse crónico es un indicador de
un proceso depresivo. En el área de la
alimentación también hay alteraciones sean estados anoréxicos o bulímicos
transitorios
La negociación implica
un estado de transicionalidad del proceso de duelo es acepto en forma
condicional esta perdida, se comienza a reactivar la persona en tareas de
interés, es un movimiento como recomenzar, la vida continua y va saliendo de
ese estado aletargado en que estaba.
Y la aceptación es
cuando la persona libre ya su libido que antes estaba ligada al objeto perdido
ya puede libremente y no sustitutivamente ligarse a otro, ya no siento dolor
psiquico por lo perdido, puede hablar, recordar sin sentir dolor, puede
evocarlo en recuerdos que no lo perturban.
Tecnicas utiles para el
proceso de duelo:
Poder poner en la
palabra escrita pensamientos, sentimientos que pueda expresar. Muchas veces
cuando una persona fallece es importante escribir una carta al fallecido como
modo de ayudar a su psiquismo de arreglar asuntos que quedaron pendientes de
expresión en vida, esto forma parte de una catarsis.
Llevar un diario
explicando su vivencia de duelo o escribir una poesía también puede facilitar
la expresión de sentimientos y darle un significado personal a esa experiencia
de perdida.
Sabemos que el arte es
el medio mas eficaz de poder sacar afuera y liberar las emociones, así que sea
en las letras o en el dibujo se reflejan los sentimientos mas profundos, en los
niños es una técnica muy buena de aplicar para que puedan descargar
sentimientos que a veces por el estadio psiquico que se encuentran n o pueden
llevar a explicarse el concepto de muerte (por ejemplo de personas mayores de
la fila abuelos, tíos, o bien de sus mascotas)
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