viernes, 18 de septiembre de 2015

COMORBILIDAD EN LA ANSIEDAD


Lic Monica Arcas

Los cuadros psiquiátricos se caracterizan por no ser cuadros unificados, puros sino que se encuentran la mayoría de la veces asociados a otras patologías y eso se llama comorbilidad
Las personas que sufren ansiedad social tienen una respuesta particular y exagerada de angustia ante situaciones o estímulos que para la mayoría de las personas no son peligrosas, y muchas veces este alto temor puede desencadenar crisis de pánico que aumenta su malestar.
En la ansiedad social suelen presentarse estados de ansiedad con participación de conductas de inhibición, síntomas de activación y pensamientos disfuncionales en las siguientes situaciones;
·      Aparece miedo a la observación de los otros, que estos piensen que es “raro”, siente la persona que no “encaja con el entorno”
·      Se preocupan por ser el centro de atención en una situación social, y es en esas ocasiones que se disparan los síntomas físicos que le confirman esa inadecuación.
·      Miedo a ser presentado, o a presentarse en un evento social, o una entrevista laboral
·      Por lo general evitan realizar reuniones en su casa y/o ámbito conocido, tienden al aislamiento.
·      Tendencia a evitar espacios donde hay muchas personas, si van a un restaurant por lo general se sientan en lugares apartados de los demás.
·      Miedo a ser presentado, o a presentarse en un evento social, o una entrevista laboral
·      Por lo general evitan realizar reuniones en su casa y/o ámbito conocido, tienden al aislamiento.
·      Tendencia a evitar espacios donde hay muchas personas, si van a un restaurant por lo general se sientan en lugares apartados de los demás.
·      Evitan las miradas de los demás, no pueden sostener la mirada interpersonal.
·      En terapia suelen tener temor al juzgamiento pues malinterpretan un señalamiento o sugerencia que pueda hacerle el profesional.
·      Tienen serias fallas en la asertividad, no defienden sus derechos, pero a veces tienen formas implosivas de defensa, somatizando la mayoría de las veces.
·      Son personas que su miedo los paralizan para tomar cualquier determinación de crecimiento, muchas veces dejan carreras por el temor de presentarse a exámenes.
·      Tampoco toman la iniciativa de iniciar una relación intima por el temor a ser rechazados.
·      Suelen ser inadecuados en la forma de acercarse al otro, por lo general son evitativos y su manifestación gestual y corporal son antagónicas a sus deseos, quieren pero no pueden manifestar su afecto.


La comorbilidad más frecuente de la ansiedad social está con otros cuadros de ansiedad como ser:
Crisis de Pánico
Agorafobia
Estrés Postraumatico
También con trastornos del humor:
Depresión
Distimia
Abuso de sustancias (especialmente abuso de alcohol)
Psicofármacos (benzodiacepinas)
Adicciones a Internet, en este caso muchas veces el paciente se aísla de tal forma que es el único recurso que tiene para comunicarse con otros a través de un nic, muchas veces adquiere una personalidad ficticia y vive en un mundo de fantasias en las redes sociales.
Es frecuente también en los varones el uso de la pornografía, el adecuarse con estos estímulos en forma continua a través de la masturbación incrementa mucho la inhibición de llegar a tener intimidad real, ya que se adecuo a una forma de autosatisfacción que controla e incrementa la inadecuación con un objeto real.
Otra comorbilidad que se ha visto en la clínica es el juego patológico, especialmente los juegos de tragamonedas, son actividades lúdicas que no requieren intervenciones interpersonales, sumergiéndose en un mundo adictivo donde la pérdida acentúa la patología ansiosa depresiva erosionando cada vez más la autoestima y perdiendo confianza en cada tarea que emprenda.
Es por ello que siempre en las admisiones de personas afectadas de síntomas de ansiedad hay que evaluar las comorbilidades, así como también los sistemas de apego que esa persona ha tenido en su historia. Por lo general tienen un apego ansioso con las figuras parentales, muchas de las veces con madres temerosas y controladoras y figura paterna rígida o ausente.




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